André Pierre-Gignac, leyenda de Tigres, jugó en la talacha con la playera de Boca Juniors

El histórico delantero francés llamó la atención en las redes sociales al mostrarse con la 10 de Riquelme.

El galo, con los colores de Tigres pero un jersey diferente: el del Xeneize.

El galo, con los colores de Tigres pero un jersey diferente: el del Xeneize.

André-Pierre Gignac sorprendió al mundo del futbol al jugar una “talacha” en Monterrey con una playera retro de Boca Juniors, un gesto que no pasó inadvertido y que volvió a encender una historia que quedó inconclusa. El delantero francés, leyenda absoluta de Tigres UANL, apareció en un partido informal luciendo la camiseta azul y oro con el número 10 que utilizó Juan Román Riquelme en la temporada 2013/2014, desatando reacciones inmediatas en redes sociales y reavivando viejos recuerdos entre los aficionados. A partir de ahí, todo tomó otro color, como verás a continuación en las imágenes.

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Gignac y la imagen que se volvió viral

El episodio ocurrió en el club amateur Benarami, en Monterrey, pocos días después de la derrota de Tigres frente a Toluca en la final del Clausura de la Liga MX. La presencia del galo en la cancha ya genera atención por sí sola, pero el detalle de la camiseta del Xeneize fue lo que transformó una escena cotidiana en un fenómeno viral. Ese simple detalle bastó para reabrir una historia que parecía cerrada, y lo que pasó después lo confirma, ¿De qué se trata?

La elección no fue casual: se trató de la última camiseta que vistió Riquelme como jugador de Boca antes de su polémica salida en 2014. Para muchos hinchas, fue leído como un guiño cargado de simbolismo, sobre todo teniendo en cuenta que el francés estuvo muy cerca de convertirse en jugador xeneize. Ese recuerdo inevitable nos lleva directamente a un capítulo que casi cambia su carrera, y te lo contamos.

Gignac a Boca: el pase que estuvo a punto de romperlo todo

En 2019 y según reveló Olé, el equipo argentino realizó una oferta formal para fichar a Gignac. Bajo la presidencia de Daniel Angelici, el club de la Ribera intentó convencer al goleador de Tigres con una propuesta seria y competitiva. El propio jugador reconoció que la negociación fue real y tentadora. Sin embargo, la decisión final tuvo un trasfondo mucho más profundo, con una frase que vamos a recordar.

Era perfecto”, llegó a admitir Gignac, al explicar que iba a cobrar lo mismo que en Tigres y que incluso tenía la posibilidad de disputar la Copa Libertadores y enfrentar a River Plate. Aun así, eligió quedarse. “No soy un traidor”, sentenció, remarcando el vínculo emocional que construyó con la afición felina desde su llegada a México. Ese compromiso ayuda a entender por qué hoy es considerado una leyenda viva, con un trasfondo revelador, ¿Lo vemos?

Gignac y la fidelidad que marcó su legado

La negativa a Boca no fue una cuestión deportiva ni económica, sino una decisión ligada a su identidad. Gignac había prometido retirarse en Tigres y cumplir cada uno de sus objetivos con el club. No haber alcanzado aún su gol 105 en ese momento y la lealtad hacia la gente que lo respaldó desde el primer día fueron determinantes. Ese sentido de pertenencia explica muchas cosas de su historia reciente, que terminó del siguiente modo en su palmarés.

Con Tigres, Gignac construyó una trayectoria irrepetible: cinco títulos de Liga MX, una Concacaf Champions Cup, una Campeones Cup y múltiples reconocimientos individuales. Superó los 200 goles y se convirtió en el máximo anotador del club y del fútbol regiomontano, además de dominar el Clásico Regio como nadie. Pero su figura va mucho más allá de México, y eso también vale la pena repasarlo enseguida.

Una carrera que trascendió fronteras para Gignac

Antes de llegar a la Liga MX, Gignac ya había dejado huella en Europa. Brilló en Toulouse como goleador de la Ligue 1, tuvo un paso destacado por Olympique de Marsella y defendió la camiseta de Francia en Mundiales, Eurocopas y Juegos Olímpicos. Su nombre quedó asociado a constancia, carácter y goles decisivos. Todo ese recorrido explica por qué cada gesto suyo genera impacto.

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