El delantero de Chivas, Daniel Ríos, cumple 8 años desde que se vistió de rojiblanco por vez primera

El buen momento futbolístico que atraviesa Daniel Ríos es parte de una historia de constancia y superación en la que el delantero del Club Deportivo Guadalajara ha pasado por distintos clubes de México y Estados Unidos antes de volver y ganarse un puesto entre los jugadores recurrentes del director técnico Veljko Paunovic.

El 24 de febrero de 2015 el atacante vivió un momento por demás emotivo en su carrera, ya que hizo su primera presentación con la playera rojiblanca. Chivas visitó a Irapuato en el estadio Sergio León Chávez, en duelo correspondiente a la Copa MX, de donde sacó un resultado favorable con un gol de Érick Torres en la recta final del partido. 

Ríos tenía 20 años de edad y portaba el dorsal número 101, con el que ingresó de cambio al 72’ en lugar de Carlos Fierro. A pesar de que no tuvo muchas opciones para generar peligro en su presentación, dejó buenas sensaciones, sin embargo no fueron suficientes para mantenerse el club y emprendió un largo viaje futbolístico.

El camino de Ríos lo llevo a la Liga de Expansión con Coras de Tepic, que posteriormente anunció su mudanza a Zacatepec, donde se mantuvo el joven para mejorar su nivel de juego. Sin embargo, de 2017 a 2019 ningún equipo mexicano se interesó en él y pasó un par de años jugando en Estados Unidos antes de su regreso a Chivas, donde ha jugado seis de los ocho partidos de lo que va del Clausura 2023, cuatro de ellos, los últimos, como titular, e incluso consiguió su primer gol en la máxima categoría en la visita a la capital para ayudar a obtener los tres puntos frente a Pumas.

Campeón con la confianza del “Chepo”

La presentación del ahora 9 del “Rebaño Sagrado” se dio bajo la dirección técnico de José Manuel de la Torre, quien confió en el ariete y lo promovió al Primer Equipo en su segunda etapa como timonel rojiblanco. Ese año Chivas ganó la Copa MX, por lo que Daniel ya sabe lo que es alzar un título copero del futbol mexicano, aunque en aquella ocasión solamente jugó 17 minutos entrando como suplente en un par de partidos, realidad distinta a sus recientes titularidades.